Autores: Hernández Pacheco René, Ramírez Hernández Guillermo, Bautista Flores Roberto
Introducción Las percepciones del mundo sus texturas, colores y sonidos; su calor, aromas y sabores son creadas por el encéfalo a partir de impulsos nerviosos electroquímicos conducidos a dicho órgano desde receptores sensoriales. Estos receptores traducen diferentes formas de energía en el “mundo real” en potenciales de acción, que conforman los impulsos nerviosos que se conducen hacia el sistema nervioso central (SNC) mediante neuronas sensoriales. El encéfalo interpreta como sonido impulsos que llegan desde el nervio auditivo, y como vista los que llegan desde el nervio óptico, aun cuando los impulsos en si son idénticos en ambos nervios. Los receptores sensoriales pueden ser tejido nervioso libre o encapsulado como en el caso del dolor, tacto, presión, o neuronas muy especializadas como los conos y bastones que se encuentran en la retina. En el caso de las papilas gustativas y las células pilosas del oído son células epiteliales modificadas, que responden a estímulos externos y activan neuronas sensoriales. Estos receptores sensoriales, ya sea tejido neuronal o epitelial especializado junto con otros tejidos de soporte forman los órganos de los sentidos
Palabras clave: Tacto gusto olfato oído visión.
2018-11-04 | 3,630 visitas | Evalua este artículo 0 valoraciones
Vol. 8 Núm.2. Mayo-Agosto 2018 Pags. 45-48. Rev Trau Amer Lat 2018; 8(2)