Autores: Basilio Olivares Alberto, Luna Tovar Agustín
Se hace una revisión completa y actual sobre el manejo de las lesiones traumáticas de uretra masculina. Se nos recuerda que la uretra está dividida en tres porciones anatómicas: prostática, membranosa y esponjosa. Las lesiones de uretra plantean un reto para el cirujano debido a su gran morbilidad. La principal causa de ruptura es el trauma cerrado, por un trauma directo o por desaceleración rápida, sin embargo no son raras las lesiones por proyectiles o instrumentos punzocortantes. La fractura de pelvis se asocia con ruptura uretral posterior en el 95% de los casos, si la lesión es superior. El diagnóstico debe sospecharse en pacientes con traumatismo pélvico perianal, cerrado o abierto siendo la evaluación inicial fundamental. Datos como punto hemático (sangre en meato uretral), edema periescrotal o hematoma, sugieren fuertemente la presencia de ruptura uretral 4. El tacto rectal generalmente evidencia una próstata elevada y difícilmente palpable. El uretrograma retrógrado es el mejor método diagnóstico. El tratamiento del trauma uretral es siempre quirúrgico. Inicialmente con derivación de la orina por cistostomía añadiéndole ferulización o reparación primaria. La impotencia, las estenosis y la incontinencia son las complicaciones más frecuentes de este tipo de lesiones.
Palabras clave: Uretra lesiones traumáticas tratamiento quirúrgico.
2010-11-05 | 1,281 visitas | Evalua este artículo 0 valoraciones
Vol. 5 Núm.2. Mayo-Agosto 2002 Pags. 55-57 TRAUMA 2002; 5(2)